Después de haber
leído la exposición de los concejales y del Director de Obras Municipales
(subrogante) me parece que algunos creen que por ser vecinas foráneas somos
tontas, que no comprendemos el lenguaje y forma de expresarse de los
algarrobinos nacidos, criados y formados acá. Puede haber algo de cierto ya que
al no haber tenido con ellos una vida en común de estudiantes, de barrio y
luego de trabajo siendo adultas, no sepamos darnos cuenta cuando están hablando
en serio o en broma en su propia jerga. Sin embargo, en el caso del enorme
despilfarro para un viaje de turismo por Europa de cinco concejales y el
profesional jefe de la Dirección de Obras, no creo que sea una broma. Con tanto
dinero en juego no caben las bromas. En la exposición del referido funcionario
en nombre de todos los concejales viajeros, no se refiere a la asistencia a un
Seminario internacional de gestión comunal, sino que afirma “El viaje a Europa fue una gira técnica”. Vale decir fue un viaje, no un curso de capacitación.
Si ellos dicen que fue un viaje “técnico”, significa que estaba programado para
técnicos y que yo sepa, ninguno de los concejales tiene esa calidad.
Se habrían
gastaron más de cuarenta millones para venir a decirnos que allá la lejana Europa
es otro mundo, todo muy hermoso, limpio, iluminado (como en Viña del Mar), con
lindos jardines (como en Viña del Mar), que colocan flores en los faroles (eso
lo hacen también lo hacen en Viña del Mar), que recogen en bolsitas la caquita
de los perritos (eso lo hacen en Vitacura y Las Condes), que usan las quebradas
(al igual como acá cerca en Valparaíso), que tienen hermosos clubes de yate y
vela (como en los lagos del sur de Chile), que allá nada es gratis (como en
Algarrobo),y que allá se cobra por todo. No puede aceptarse que eso haya
sido lo que aprendieron y capacitaron. Este famoso seminario de capacitación es
un fiasco y deben ser investigado y sancionado si se comprueba lo que es
evidente a la luz de las propias declaraciones de los afortunados viajeros. Si
ello no hace reaccionar con indignación a los vecinos algarrobinos de corazón,
tal como lo han hecho para defender a los pingüinos, entonces, prefiero ser
pingüina.
No han dicho a
cuantos institutos de capacitación asistieron, los ramos que cursaron, la
calidad de los profesores y sus acreditaciones, sus certificaciones de
asistencia y aprobación, etc.
Acá en Algarrobo
viven hijos de españoles cuyos padres llegaron a Chile de Barcelona y por tanto
tienen sus familias allá y conocen Barcelona con detalle. Ellos, algarrobinos
de toda la vida, podrán haberle enseñado a los concejales sobre el borde
costero y sus playas artificiales y el municipio se hubiese ahorrado una buena
suma de dinero. Acá en Algarrobo, viven también franceses y chilenos que
vivieron en Paris y podrán haber hecho lo mismo. El problema está en que ellos
no pertenecen al grupo de amigos y amigos que acá creen saberlo todo por ser
originarios de Algarrobo. Es una soberbia imperdonable. Con esta ceguera,
continuaremos metidos en el hundimiento de Algarrobo que el alcalde prometió
sacar adelante. El Sr. Santis lo pronosticó hace un año según he leído hoy.
El Diccionario
Manual de Sinónimos y Antónimos de la Lengua Española dice que “Tomadura de
pelo” se usa cuando se pretende
engañar mediante una ficción, burla o engaño y da como ejemplo la siguiente
frase: “Esta conferencia ha sido una tomadura de pelo”. Cambiemos
palabra “Conferencia” por “Seminario” y estaremos cerca de lo que estamos
viviendo.
¿Qué autoridad y/o ente fiscalizador investigará
esta situación que implica el uso de fondos públicos?
Isabel Rodríguez D.