Continuo leyendo con atención las cartas del señor
alcalde versus los "Iluminados", que son muy interesantes.
Insisto, creo que se debe dejar primar la inteligencia y
dejar de lado las pasiones que a nada conducen. Ambas partes tienen un fin
común y es lo importante a potenciar.
Señor alcalde, por favor, acepte la cooperación de
las personas con experiencias diferentes a las suyas, no es su
obligación ser fuerte en todas las disciplinas y no es una deshonra el
aceptarlas, muy por el contrario es una fortaleza, la vida y los años
pasan y no vuelven.
La unión de las voluntades hace la fuerza y trae progreso.
Saludos cordiales.
Pablo Nuyens