Me
encanto el artículo relativo a la comunidad ecológica de Tunquén, es una forma
de vida muy interesante, centrada en el contacto con lo natural y verdadero,
personalmente considero que es un ejemplo a seguir, en especial para la
sociedad en que nos hemos transformado, donde todo es desechable, todo se bota, muy pocos reflexionan sobre el futuro, no obstante debemos pensar
que cada uno de nosotros estamos de paso y que la naturaleza es un regalo
que debemos cuidar, para quienes estamos gran parte de la vida en Santiago,
es lamentable, ver como ya nadie se preocupa de mirar el cielo, o escuchar
el canto de los pájaros. Por ello es maravilloso conocer experiencias
como la descrita en el artículo, “Viva Tunquén” y gracias por
transformarse en un testimonio real, espero alguna vez poder conocerles y por
ahora esperar que nos ayuden con consejos y recomendaciones para poder avanzar
hacia un mundo más ecológico y sustentable.
Con
cariño
Patricia
Aguilar Olmos
Administrador
Público